CEPB califica de “ambicioso” pensar en 4% de crecimiento del PIB porque la economía ésta por los suelos

Por Edwin Miranda V. / Activo$ Bolivia / Bolivia Energía Libre-La Paz

El optimismo que tiene la Confederación de Empresarios Privados de Bolivia (CEPB) sobre la reactivación de la economía post Covid-19 no es de las mejores.

De hecho su máximo representante, Luis Fernando Barbery Paz, dejó en claro que el aparato productivo aún atraviesa una “crisis severa” lo que hace “ambicioso” pensar que el Producto Interno Bruto (PIB), repuntará hasta en un 4%, hasta fin de año, como estimó el Gobierno porque la economía está por los suelos.

Estamos frente a una “durísima crisis economía, sanitaria y social”, alertó.

¿Cómo justificó Barbery está situación que a criterio del gobierno, es totalmente lo contrario ya que considera que la economía comenzó a levantar cabeza luego de la asunción del nuevo gobierno?

“Si bien la economía estaba en desaceleración (desde el 2014), la pandemia terminó por dejarla por los suelos”, afirmó el ejecutivo.

El jefe de la patronal boliviana llegó a la ciudad de La Paz, para hablar con los medios de comunicación sobre dos cosas centrales para el sector: su reelección como máximo Presidente Ejecutivo de la CEPB, hasta el 2023; y la necesidad de que, el Primer Mandatario, Luis Arce, escuche al sector para hablar de reactivar la economía en un encuentro, que una vez más, fue solicitado efusivamente por los empresarios.

“Con el mayor respeto, luego de sucesivas solicitudes (hechas a las autoridades), reiteramos a nuestro gobierno nacional la necesidad de reunirnos, debatir, discutir los álgidos problemas que atraviesa la economía y nuestro país y que nos preocupa de sobre manera”, arengó Barbery.

Pero ¿Qué esperan hablar con el Presidente, Luis Arce?

Según Barbery existen problemas muy serios por resolver, como por ejemplo, el déficit fiscal que se halla por encina del 12%, el menor índice de las Reservas Internacionales Netas (RIN) que registra hoy el Estado, las reducidas y depauperadas exportaciones bolivianas al mundo como efecto de la pérdida de competitividad, lo que está restando divisas al Estado.

“Son muchos temas que se deben abordar y tienen que identificarse”, complementó.

Nuevo país para el 2030

A la espera de la convocatoria que solo espera hora y día, los empresarios tienen listo un paquete de reformas laborales, tributarias y financieras para presentarlas al Presidente, adelantó decisiones el Gerente General de la Cámara Nacional de Comercio (CNC), Gustavo Jauregui para quién además el encuentro deberá terminar blindando una alianza público-privado para activar nuevas medidas económicas que requiere el Estado.

“El empresario boliviano es un héroe y patriota por seguir apostando a su país, no está pidiendo regalos al gobierno, por el contrario, requiere solo condiciones para seguir invirtiendo en una coyuntura, difícil, complicada, y hasta, desigual para el sector privado”, arengó el gerente  de la CNC.

En consonancia con esta posición, Barbery terminó blindando posiciones.

“Por supuesto, hemos presentado no solamente en octubre pasado dos propuestas importantes para el país, éste el gobierno que éste”, afirmó el ejecutivo empresarial.

Es más dijo que plantearon al actual Presidente, Luis Arce, reformas estructurales para construir un nuevo Estado, en lo económico, con proyección al año 2030.

“Entonces aquí no hay magia. Todo esta en sintonía. La propuesta es integrada y transversal y va más lejos”, apuntó el empresario.

La crisis encoje la economía y un incremento salarial subirá el desempleo

La crisis sanitaria encogió la economía hasta en un 8.5% que, según Barbery, implica que perdimos aproximadamente $us 4.000 MM, lo que ha puesto al aparato productivo y las arcas fiscales en “serias dificultades”.

Con una situación tan compleja para el Estado hablar de incremento salarial no calza con la coyuntura, apuntó también Barbery en referencia a la insistencia de la Central Obrera Boliviana (COB), de acceder, éste año, a un incremento salarial estimado entre un 10% y 15%.

“Las empresas fallecen también, cientos de empresas, miles de micro empresas quedaron en el camino con esta crisis, los empleos y nadie habla de esto”, afirmó.

El ejecutivo privado fue además concluyente cuando declaró que “no podemos estar hablando de un incremento salarial del 10% y 15% (pues) son cifras fuera de contexto. Creo que hablar de aumento salarial implica hablar de desempleo, implica promover la precarización del empleo”.

Invitó a quienes insisten en subir los salarios en medio de una crisis que incluso no se equipara a lo que tuvo el país en el gobierno de la UDP (1982-1984), a mostrar y actuar “con mucha inteligencia, mucha serenidad. Tiene que manejarse el tema con mucho cuidado”, apuntó.