Chile segundo país en la región con mejores oportunidades de inversión en el mercado solar

Por Edwin Miranda V. / Bolivia Energía Libre-La Paz                      

Solar Power Europe 2020 realizó un reporte sobre las oportunidades de inversión en el mercado solar de Latinoamérica, donde se considera el contexto económico, social y político, además del perfil macroeconómico del país, energía y electricidad, la situación del sector energético, su infraestructura, stakeholders y las demandas del mercado como factores de estudio.

De esta manera Brasil, Chile, Colombia y México calificaron como naciones que tiene condiciones óptimas para cobijar inversiones privadas para desarrollar energía solar.

Bolivia, no figura, en la lista de potenciales países para desarrollar proyectos de gran envergadura en materia de energía solar.

 El informe destaca también que la posición de los países mencionados, responde a las condiciones de estabilidad económica y los bajos índices de corrupción que tienen.

Los calificados

El estudio describe que las condiciones regulatorias, y los ajustes que están incorporando, aportarán al mercado solar local la posibilidad “seguir mejorando su entorno empresarial y atrayendo a inversores extranjeros”.

Según el documento los últimos años se ha mejorado en la ejecución de contratos, resolución de insolvencia y facilidad de hacer negocios.

En el ámbito energético el informe también destaca la alta radiación de Chile y sus más de 4.000 horas de sol anuales en el sector norte, debido a que “el Desierto de Atacama tiene uno de los niveles de potencial de energía fotovoltaica más altos del planeta y es una de las piezas centrales de la transformación energética del país”.

Esto posiciona a Chile, en uno de los lugares más condicionados en América Latina, para proyectos de energía solar y al mismo tiempo, recalca que la costa chilena es propicia para el desarrollo de energía eólica por las corrientes de aire que se provocan tanto en el norte como en el sur, junto con su capacidad para generar energía hidroeléctrica y geotérmica por cadena montañosa.

“Chile tiene 4.300 km de largo y en promedio solo 177 km de ancho, lo que crea desafíos únicos para la planificación de la infraestructura energética del país.  No obstante, el potencial solar sin precedentes en el desierto de Atacama y en otras áreas altamente irradiadas sigue atrayendo inversiones nacionales y extranjeras”, señala el informe internacional.