Brasil acelera proyectos de GNL para sustituir el gas boliviano

Por Edwin Miranda V. / Bolivia Energía Libre-La Paz

Brasil acelera varios proyectos de construcción de plantas de licuefacción para GNL con el objetivo de sustituir, gradualmente, la importación de gas natural de Bolivia, abrir nuevos mercados y sobre todo, bajar sustancialmente, los precios al energético que en la actualidad tienen costos altamente competitivos, alertaron ayer a Bolivia Energía Libre, analistas del sector petrolero.

El gas natural licuado (GNL) es gas natural  procesado para ser transportado en forma líquida. Es la mejor alternativa para monetizar reservas remotas y aisladas, donde no es económico llevar el gas al mercado directamente ya sea por gasoducto o por generación de electricidad, señala la Enciclopedia Libre.

“Las plantas de GNL concebidas por el Brasil llegan a un número de seis, y dos de ellas, ya están en construcción”, reveló el exSuperintendente de Hidrocarburos, Hugo De La Fuente y respaldo la información el exMinistro de Hidrocarburos, Álvaro Ríos.

Puerto de Acu en el Estado de Río de Janeiro y Barcarena en el Estado Pará, contarán con modernas plantas de GNL el 2021, precisó la información Ríos, en un conversatorio virtual que participó a iniciativa de la Gobernación de Santa Cruz, para hablar de la problemática de los hidrocarburos en Bolivia y los desafíos que debe afrontar en los próximos años.

Otras cuatro estaciones de licuefacción de GNL están en fase de estudio de los cuales, dos serán implementados en Río de Janeiro, uno en Sao Paulo y otro en Sao Francisco do Sul, en el Estado de Santa Catarina, hasta el año 2022, para importar entre 14 a 25 millones de metros cúbicos diarios de gas (MMmcd.) refiere un informe revelado por Ríos.

Nuevo mercado para el gas en Sudamérica

Definitivamente estamos en las puertas de un “nuevo mercado para el gas en Sudamérica” donde van a predominar compradores privados e independientes, apuntó por su parte De La Fuente.

En la última década se ha ido fraguando una estructura comercial capaz de soportar un único mercado mundial de GNL. De este modo, poco a poco se han ido rompiendo las rígidas estructuras de los contratos a largo plazo indexados al petróleo, para dar paso a unas estructuras de flujos más flexibles.

Las nuevas estructuras se caracterizan por menores plazos, transacciones spot (solo un barco) y por la diversidad de indexaciones usadas, explicó La Fuente.

El presidente del Brasil, Jair Bolsonaro, conoce de esta realidad, y por eso, ha puesto en marcha una nueva estrategia para la comercialización de gas natural en su país que pasa por “reducir la posición dominante, y en algunos casos monopólicos que tuvo hasta ahora Petrobras».

«La propuesta lleva el nombre de Gas para Crecer y entre sus medidas más significativas está, por ejemplo, fomentar el ingreso de privados a la cadena de producción hidrocarburífera”, señaló el consultor internacional en energía.

“Lo que está promoviendo el vecino país, en el caso concreto de la importación de gas natural,  es reducir la participación de Petrobras en el mercado del gas,  lo que implica abrir oportunidades únicas, para el ingreso de nuevos importadores directos, que dicho de paso, tendrán facilidades para comprar, por ejemplo a Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), directamente, sin necesidad de un intermediario”, subrayó De La Fuente.

Ríos coincidió con está línea de opinión. Como efecto de esta nueva política hidrocarburífera, el Brasil tendrá precios competitivos para comprar gas natural en el mercado internacional, dijo.

Según el analista “están surgiendo nuevos tipos de contratos en los cuales los precios para el gas natural ya no están indexados al precio internacional del petróleo, sino a otro tipo de referencias como el Henry Hub o el JKM que maneja precios en el Asia”, acotó.

 “El precio de GNL por ejemplo,  en el punto de  comercialización  internacional denominado Henry Hub,  asciende a $us 2.17 el MMmcd, un costo de importación altamente competitivo”, precisó La Fuente.

Brasil cancela actualmente por el gas natural que importa de Bolivia $us 5 el MMmcd y a la Argentina $us 6 por cada MMmcd, indicó el experto para demostrar cómo y bajo qué condiciones está bajando el precio del gas en el mercado internacional y en el vecino país. 

En este sentido, la determinación de precios ha evolucionado de la pura indexación al precio del petróleo, totalmente desligada de las inercias del mercado de gas natural, a una indexación fijada cada día más en torno a los grandes mercados gasistas: Henry hub, el TTF y JKM, acotó Ríos.

El mercado del GNL en América Latina

La presencia de América Latina en el mercado mundial de gas natural representa actualmente el 7,5% del comercio de gasoductos y el 6,2% del GNL.

América Latina es un importador neto de gas natural, aunque tiene reservas equivalentes al 4,2% de las reservas mundiales que aún están en gran medida sin desarrollar.

La región tiene un importante país exportador: Trinidad y Tobago, cuyo complejo GNL Atlantic (Atlantic LNG Facility) exportó aproximadamente 25.1 millones de metros cúbicos de GNL en 2018.

A pesar de presentar volúmenes relativamente pequeños a escala global, si el ritmo de crecimiento continúa, la región podría convertirse en un jugador mundial importante para este mercado, informaron medios locales en la Argentina conocidos por Bolivia Energía Libre.