Gobierno alerta que la provisión de combustibles está en “límites críticos” en el Estado

Por Edwin Miranda V. / Bolivia Energía Libre-La Paz

La provisión de combustibles líquidos –diésel y gasolinas- llegó a  niveles críticos en el Estado como resultado de una pésima gestión administrativa de los hidrocarburos durante la administración de la expresidenta Jeanine Añez.

“Hemos llegado a unos niveles tan críticos en el abastecimiento de gas y líquidos a la población”, afirmó en las últimas horas el Ministro de Hidrocarburos y Energías, Franklin Molina a modo de un primer diagnóstico que hizo sobre la situación del sector.

Para encarar con seriedad el problema y subsanar las dificultades que existen, actualmente, delegó al nuevo Director Nacional de Hidrocarburos (ANH), Germán Daniel Jiménez, tomar medidas administrativas adecuadas para prestar certidumbre a la población con una provisión segura de combustibles.

“La agenda es bastante amplia, el desafío es también grande, pero creemos que con trabajo y altura técnica vamos a poder sacar todos estos retos y salir adelante”, afirmó Molina.

Según la autoridad, la gestión pasada dejó un Estado con “limitaciones” y con altas dificultades estructurales en lo referente a la provisión de combustibles.

Las condiciones tanto de abastecimiento como de logística no pueden ser afectadas por la pandemia. Lo que tenemos al frente es el resultado de una “pésima gestión”, subrayó la autoridad ministerial.

Producción de líquidos en el Estado

Durante  la  última  década  la  producción  nacional  de  hidrocarburos  líquidos  estuvo  marcada  por  el incremento  de  la  producción  de  condensado  de  los  Reservorios  de  Gas  provenientes  de  los  campos Margarita – Huacaya, Sábalo, Aquio – Incahuasi, además de la notable disminución de la producción de Petróleo Crudo, señala el documento Agenda de Reactivación de los Hidrocarburos que elaboró el exministro del área, Víctor Hugo Zamora.

La producción de hidrocarburos líquidos en Bolivia está compuesta por petróleo crudo, condensado y gasolina natural proveniente de los campos en explotación que cuentan con facilidades de adecuación de fluidos y extracción de licuables.

Hay que aclarar que el condensado es producido como consecuencia de  la  producción  de  Gas  Natural,  ya  que  ambos  se  encuentran  en  la  mayoría  de  los  casos,  asociados dentro de los yacimientos

Según el documento la producción de líquidos en Bolivia comenzaron a declinar hace cinco años.

En este sentido de un promedio de 63.9 millones de barriles día de petróleo (MBDP)  en la gestión 2015, la producción declinó a 45.9 MBDP en diciembre de 2019, precisa el referido informe al que tuvo acceso Bolivia Energía Libre.