Cerca de volver a la Casa Blanca

Por ANSA / Bolivia Energía Libre-La Paz

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, podría abandonar el hospital militar donde se encuentra ingresado tras dar porsitico de Covid-19 «este lunes», dijo el equipo médico que lo asiste, que anunció que mejora y que no tiene fiebre desde el viernes.
Lo afirmó Brian Garibaldi, uno de los miembros del equipo médico del hospital militar Walter Reed, quien indicó que si el mandatario Trump mantiene su actividad, movilidad y se sigue sin problemas respiratorios «podría ser dado de alta mañana».
«Nuestro plan es que esté fuera de la cama todo lo posible para que tenga movilidad y, si sigue sintiéndose bien hoy, nuestro plan es que pueda ser dado de alta mañana y volver a la Casa Blanca, donde continuará su tratamiento», detalló Garibaldi.
«Está evolucionando muy bien y si continúa así volveremos a la Casa Blanca», añadió el médico personal del presidente, Sean Conley, quien confirmó que el mandatario fue conectado a oxígeno suplementario el viernes por la mañana al experimentar una caída de los niveles en sangre, una caída que se repitió con menor gravedad el sábado.
No obstante, explicó que si bien que el nivel de saturación de oxígeno en la sangre de Trump bajó dos veces desde su diagnóstico, nunca estuvo por debajo del 90%. Su nivel de oxígeno es ahora del 98%, óptimo, indiaron los facultativos.
Los médicos explicaron que, además de seguir hoy con el tratamiento del antiviral Remdesivir, Trump ha comenzado a recibir el corticoesteroide dexametasona para evitar nuevos episodios de caída de oxígeno en sangre. La dexametasona es un esteroide, un tipo de medicamento que ha demostrado eficacia en pacientes de Covid-19, la enfermedad provocada por el nuevo coronavirus.
Además, el presidente recibirá hoy una tercera dosis de Remdesivir dentro de un plan de cinco días y el viernes le fue suministrado un cóctel de anticuerpos de la farmacéutica Regeneron. Garibaldi, médico neumonólogo, aseguró que se están vigilando las funciones cardíacas, hepáticas y los riñones de Trump y la evaluación muestra «hallazgos normales o mejorados».
El presidente no ha mostrado dificultades respiratorias desde el sábado y no ha tenido fiebre, por lo que los doctores reiteraron su optimismo sobre su evolución.
Sean Conley, galeno de la Casa Blanca, también añadió que en los escáneres pulmonares que se le han practicado a Trump solo han visto «hallazgos esperados» y no hay «mayores preocupaciones clínicas» a ese respecto.
Ayer, en un video de más de 4 minutos, el mandatario llevó tranquilidad a los norteamericanos. «Llegué aquí, no me sentía bien. Me siento mucho mejor ahora», dijo.
«Estamos trabajando duro para que vuelva (…) Creo que volveré pronto y espero terminar la campaña tal como la inicié», agregó, con semblante relajado, vistiendo una camisa con el cuello abierto y una chaqueta azul.
Lo galenos brindaron hoy un rueda de prensa para dar a conocer el segundo boletín médico sobre el estado del presidente, ingresado al Centro Médico Militar Nacional Walter Reed en Bethesda, Maryland, el viernes último.