Von der Leyen lanza un plan de 300.000 millones para acabar con la dependencia de Rusia

  • El vicepresidente de la Comisión Europea, Frans Timmermans, ha reconocido que es posible que la situación creada por la guerra provoque un aumento temporal del uso del carbón

Por ABC / Bolivia Energía Libre-La Paz

La presidenta de la Comisión EuropeaUrsula von der Leyen, ha presentado el nuevo plan energético para aumentar la independencia energética de Europa acelerando el despliegue de las fuentes renovables, como resultado de la decisión desconectar a la UE de Rusia que se ha establecido a causa de la guerra en Ucrania. El plan bautizado REPowerEU propone actuar tanto en materia del ahorro de electricidad, el de la diversificación de los suministros pero sobre todo en la aceleración de la transición energética, con el objetivo esencial de eliminar las importaciones energéticas rusas.

La presidenta ha aprovechado la guerra para acelerar el Pacto Verde que ya había planteado como eje central de su mandato antes de la invasión rusa de Ucrania y que ahora se convierte en el mecanismo para eliminar la dependencia de los hidrocarburos rusos.

La Comisión propone entre otras cosas que incrementar los objetivos fijados para 2030 y subir del 9 % al 13 % el de eficiencia energética y del 40 % al 45 % el del despliegue de las energías renovables, para alcanzar una potencia de hasta 600 gigavatios en toda la UE.

En este sentido piden acelerar los procedimientos de autorizaciones para instalar las energías renovables y la infraestructura asociada, como las redes eléctricas y hacer obligatorio que todos los edificios públicos y comerciales que se construyan a partir de 2025 tengan paneles solares en el techo, un requisito que se impondría a las nuevas construcciones residenciales a partir de 2029.

La presidenta de la Comisión ha mencionado inversiones de «cerca de 300.000» millones, unos 72.000 millones en subvenciones y 225.000 millones en préstamos. El documento habla de 210.000 millones como coste de esa desconexión de las fuentes energéticas rusas. En todo caso, las instituciones europeas han decidido que no es aceptable que en estos momentos sigamos financiando la guerra de Vladímir Putin con el dinero que le pagamos por su gas y su petróleo.

El plan también prevé doblar el despliegue de bombas de calor, incluye medidas para integrar las energías geotérmica y solar térmica en sistemas de calefacción comunes y establece el objetivo de alcanzar las 20 millones de toneladas de hidrógeno renovable para 2030 y de 35.000 metros cúbicos la de biometano. La presidenta ha mencionado la cantidad de 2.000 millons de euros para reformas técnicas que permitan a algunos países dejar de importar petróleo ruso. Hungría, que es el país que se opone precisamente a que se aprube el embargo total de compras de petróleo ruso, ha cifrado en 750 millones las inversiones que requeriría transformar su industria petrolera que hoy solo funciona con crudo ruso.

El vicepresidente de la Comisión, responsable del Pacto Verde, Frans Timmermans, ha reconocido que es posible que la situación creada por la guerra provoque un aumento temporal del uso del carbón pero insistió en que no espera que ello incremente las emisiones gracias al empuje en la instalación de capacidad renovable.